Un buen amigo me hace llegar el libro de José Antonio Pagola: "Jesús, aproximación histórica". No tenia urgencia en tenerlo, pero se lo agradezco enormemente. Es mas, tengo intención de sacar tiempo para leerlo. A mi no me gusta Pagola, pero basta que le estén dando tanta guerra para que me disponga a leer el libro. A mi su teología me parece flojita, pero no acepto que lo acusen de "hereje y arriano" tan a la ligera; estas cosas hacen daño, no solo al autor, sino a toda la Iglesia.
Me da miedo esta iglesia (con minúscula) que nos rodea, con la que no me puedo identificar, porque cualquier día me anatematizan a mi tambien por ser diferente (aunque yo me creo de lo mas normal).
He leído tambien el comunicado de este hombre defendiéndose, se nota el dolor por la "condena"... de unos pocos. De la Iglesia se espera otra cosa, lo que proclamamos en la plegaria Vb: "que tu Iglesia, Señor, sea un recinto de verdad y de amor, de libertad, de justicia y de paz, para que todos encuentren en ella un motivo para seguir esperando".
Hasta los carcas de toda la vida -como yo- nos cansamos de estos "neo-carcas estéticos" que quieren devolver la "pureza" a la Iglesia. No se dan cuenta que la pureza de la Iglesia sólo se encuentra en la comunión. Quien ex-comulga, él solito se situa fuera de la comunión.
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